(Pulsa para ampliar) |
Porciones / número de personas: 4
Tiempo de Preparación: 60 minutos
Tiempo de cocción: 60 minutos
Categoría: Aperitivos y tapas, Entradas frías y calientes, Carnes, Verduras y legumbres, Light
Dificultad: Fácil
Introducción:
Hoy nos vamos a dar un homenaje.
Y, por el nombre de la receta, parece que es muy calórico, pero todo lo contrario.
Las manitas son gelatina y el solomillo es la parte más magra del cerdo y las acompañamos con verduras no feculentas con lo cual el resultado es poco calórico en relación con otros platos parecidos.
Atención a la presencia y textura de esta receta; simplemente espectaculares.
Ingredientes:
500 grs. de puntas de solomillo de cerdo
2 manitas de cerdo
3 dientes de ajo
2 cebollas
4 zanahorias
1 vasito de sidra (o vino de la tierra blanco)
7 u 8 granos de pimienta
1 hoja de laurel
1 cucharada de pimentón dulce
3 cucharadas de aceite
sal
Instrucciones:
Pon en una olla exprés 3 cucharadas soperas de aceite y colócala sobre fuego medio-alto.
Pela los dientes de ajo, ponlos enteros y cuando estén dorados, echa las manitas y sofríelas ligeramente (1-2 minutos).
Ahora, agrega las puntas de solomillo y menéalas junto con las manitas de 2 a 3 minutos.
Corta la cebolla no muy fina, pela las zanahorias y trocea en 3 ó 4 cada una (el tamaño de las verduras no importa mucho ya que van después trituradas). Agrégalas a la olla y déjalas sofreir por 2-3 minutos.
Ahora vierte dentro de la olla (y de tu cuerpo serrano, si te apetece) la sidra o el vino blanco y deja que hierva 4 minutos a fuego vivo. Entretanto, agrega la pimienta, la hoja de laurel, el pimentón y una cucharada rasa de sal.
Una vez que ha hervido, pon agua en la olla hasta que cubra las manitas, tápala y cuando empiece a sonar la válvula, baja el fuego al mínimo (en mi vitrocerámica al 3) y cuenta una hora.
Destapa la olla y cuidando de que no se te caiga la baba dentro, saca las manitas e intenta desmenuzarlas si quieres que los comensales no se encuentren los huesecillos. Aparta las puntas de solomillo a un plato (no te comas ninguna por el camino) y retira el laurel.
Coge la batidora y tritura el contenido de la olla con cuidado de que no te salpique. Como las manitas han soltado su gelatina, la salsa va a quedar muy suave.
Por último, sirve las puntas con trozos de manitas (deshuesadas o no) y acompáñalas con la salsa.
Exquisitas y realmente fáciles. |
0 comentarios:
Publicar un comentario